Argentina.- Un hombre asesinó a su esposa, a tres de sus hijos, un vecino y luego se suicidó en esa ciudad argentina este jueves en horas de la mañana.
Roberto Daniel Vecino, de 57 años de edad, tomó una cuchilla y asesinó a puñaladas a su esposa Marta Esther Curuchet, luego de tener una discusión con ella que lo encolerizó de tal manera que lo llevó a cometer el delito.
Luego, hizo lo mismo con su hija Rosa de 21 años, Etelvina de 19 y con su hijo Roberto de 19 años, cuando este último estaba entrando a su casa y se percató de lo que ocurría. Toda la escena se llevó a cabo en un lapso de diez minutos.
Según declaraciones de los vecinos e investigación de las autoridades, el hombre atacó a su hijo Roberto fuera de su casa, cuando intentó escaparse al ver los cuerpos en el suelo. Fue en la calle que logró arremeter contra él un vecino que fue testigo de los acontecimientos.
Este último, llamado Horacio Córdoba y de 70 años de edad, fue el único que acudió a auxiliar al joven. Sin embargo, su intento resultó fallido y el criminal lo degolló, sumando una víctima más a su repertorio.
Las personas que se encontraban cerca llamaron a la policía, quienes llegaron al poco tiempo para atender la emergencia. El asesino hirió a ambos oficiales en sus manos y alcanzó a entrar al galpón de su casa para refugiarse de las autoridades.
Un tiempo después, los efectivos del Grupo de Apoyo Departamental (GAD) de la localidad entraron al lugar y lo encontraron muerto.
Roberto Daniel Vecino se ahorcó luego de haber cometido el asesinato quíntuple y arremetido contra dos policías. El hombre tenía problemas psicológicos y el detonante de esta tragedia estaría relacionado con una infidelidad de su pareja que acababa de descubrir.
Sin embargo, la doctora Analía Duarte, después de analizar el escenario, afirmó: «Se habla de una fuerte discusión esa mañana, pero por lo pronto no hay antecedentes de denuncias de violencia, ni en la casa ni en el ámbito laboral de Vecino. Incluso tenía una buena relación con su ex mujer».
Este caso ha conmocionado a los habitantes de la ciudad por su magnitud, ya que en muy poco tiempo se arrebató la vida a cinco personas inocentes.