Alrededor del 80% de lo que el ser humano hace lo aprende gracias a la vista, por lo que este se considera el sentido es el más importante de todos.
Mediante la vista logramos capturar las imágenes, mientras que con la visión es posible hacer el procesamiento de éstas, el contexto, el tiempo en que ocurren y más datos que en conjunto llegan al cerebro para poder convertirse en aprendizaje nuevo.
Aquí estaremos presentando algunos tips y curiosidades que funcionan para cuidar y proteger la vista del medio ambiente y de otras cosas que pudiesen dañarla; como, por ejemplo, un dato muy importante es que el 70% de la población sufre de fatiga ocular y esto se debe a que los ojos constantemente se encuentran expuestos a los rayos ultravioleta y no sólo por el sol, sino por el estilo de vida que hemos adoptado.
La fatiga ocular está relacionada directamente con la resequedad ocular, ya que los ojos se mantienen abiertos por período prolongado de tiempo, lo que evita la lubricación correcta que permite al ojo mantenerse sano y descansado.
Resulta muy importante que durante al menos el 10% de nuestro tiempo diario tengamos los ojos cerrados; y esto lo logramos con los parpadeos.
¿Te han salido lágrimas sin ningún motivo? Esto se debe a que el parpadeo no es suficiente para los ojos y necesitan estar humectados. Principalmente, pasa cuando la exposición al sol o a ambientes como el aire acondicionado ha sido muy prolongada. Un ejemplo de ello se observa en los bebés, ellos comienzan a producir lágrimas a partir de la tercera o cuarta semana de vida y esto es porque los ojitos están cerrados hasta un 80% del tiempo.
Una investigación realizada por Transitions refleja que una manera de evitar la resequedad y el cansancio ocular es protegerse contra los cambios bruscos de luz y por supuesto, de los rayos ultravioleta; por lo que resulta importante el uso de lentes que bloqueen hasta en un 90% la radiación solar y el impacto de la luz. En este sentido, la tecnología fotosensible es una de las más innovadoras para evitar daños e incluso el padecimiento de enfermedades oculares a largo plazo.
De igual forma, es importante no frotar los ojos con las manos, porque esto puede ocasionar que se acumulen bacterias en los glóbulos oculares y por ende incrementar el riesgo de infecciones. Con la puesta en práctica de estos consejos y la visita periódica al oftalmólogo, aparte de mantener una alimentación balanceada y rica en vitamina A; sin duda alguna podremos disfrutar de una excelente salud visual y de las maravillas de la visión que no sólo se limitan a aprender.