Nueva York.- El fiscal general del estado de Nueva York, Eric Scheneiderman, anunció este lunes que el banco británico Barclays deberá pagará una multa de 100 millones de dólares por el escándalo de la manipulación del tipo de interés interbancario Libor.
«Debe existir una sola regla para todos (…) y esto incluye a los grandes bancos y otras instituciones financieras de Estados Unidos o el mundo que incurran en fraude o dificulten el funcionamiento correcto de los mercados financieros de todas las naciones», declaró el fiscal norteamericano a través de un comunicado.
Barclays fue hallado responsable por haber realizado una conducta fraudulenta y contraria a la competencia por manipular el Libor, según la oficina del fiscal de Nueva York, la cual lideró de manera conjunta con la de Connecticut una investigación sonde estuvieron participando 44 de los 50 estados de Estados Unidos.
Scheneiderman, añadió en el comunicado emitido a la prensa que, «Como resultado de la mala conducta que tomó Barclays, diversas entidades del Gobierno y otras sin fines de lucro fueron defraudadas de los fondos que de otro modo podrían haber sido utilizados para beneficiar a los ciudadanos neoyorquinos».
El fiscal general también enfatizó que Barclays es el primero de los grandes bancos internacionales que se encuentran bajo investigación por lo ocurrido y además sostuvo que desde el primer momento de este anuncio la entidad bancaria británica cooperó con su oficina.
Este escándalo inició en el año 2012, cuando dicho banco reconoció por primera vez que varias de sus trabajadores manipularon el Libor, con la finalidad de conseguir beneficios económicos para aumentar su imagen de fortaleza durante la crisis financiera que vivía el país.
En consecuencia de este problema, la operadora de la bolsa de valores de Nueva York, NYSE Euronext, se hizo con el contrato para administrar desde ese año el Libor, el cual tenía varias décadas bajo la supervisión de la Asociación de Banqueros Británicos (BBA).
El Libor es un tipo de referencia mundial que es fijado diariamente, con la finalidad de determinar el interés que pagan los bancos entre sí, el cual también afecta a una gran variedad de productos financieros, como préstamos estudiantiles, hipotecas o tarjetas de crédito.