Jair Bolsonaro reasumió la presidencia de Brasil desde un cuarto de hospital en Sao Paulo, donde ingresó para sometérsele a una cirugía de reconstrucción intestinal.

El presidente Bolsonaro lo operaron el lunes y un día después se mantenía «estable», sin «sangrados o ninguna otra complicación». Sin embargo, las visitas continúan «restringidas», de acuerdo con el último boletín médico del Hospital Israelita Albert Einstein, publicado el martes por la tarde.

En la agenda presidencial de Bolsonaro para este miércoles no consta ningún compromiso oficial, confirmó la asesoría del Palacio de Planalto. 

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Reasuminó la presidencia desde el hospital

El portavoz de la presidencia, Otávio do Rêgo Barros, anteriormente había informado que Bolsonaro trabajaría durante los 10 días que estaría internado desde una oficina montada dentro del hospital, donde podrá recibir a sus ministros una vez que los médicos autoricen las visitas extrafamiliares. 

Aun cuando obtenga el aval médico, «intentaremos evitar que las reuniones se hagan de manera rutinaria, de modo que puedan cansarlo. Al final, se trata de un hombre que pasó por tres cirugías«, se informó desde la Presidencia. 

Por su parte, el encargado de sustituirle durante las 48 horas, desde que Bolsonaro entró al quirófano, el lunes por la mañana, fue el vicepresidente, Hamilton Mourao.

Bolsonaro, de 63 años, entró el lunes en el quirófano para la retirada de una bolsa de colostomía, la tercera intervención que se le practica desde que fue apuñalado por un hombre en plena campaña electoral, cuando participaba en un mitin en Juiz de Fora, municipio del estado de Minas Gerais, el 6 de septiembre.

“Reasumo las funciones de la Presidencia de la República”, publicó el mandatario en el mensaje, su segundo comunicado tras la operación en la red social, que ya usó ayer para decir que estaba “bien” desde el centro médico donde se encuentra hospitalizado.

Para reparar las lesiones en el intestino le practicaron una colostomía (conexión del intestino con una bolsa fuera del cuerpo para eliminar heces), que se revirtió en la cirugía del lunes. 

“El apoyo que estoy recibiendo será fundamental para mi total recuperación”, agregó el presidente dando las gracias una vez más.

La operación duró unas tres horas más de lo previsto, siete en total, y el presidente no presentó ninguna complicación, sangrado o fiebre, según los médicos.