La conocida Feria de las Flores atrajo a 11.139 turistas aproximadamente a la ciudad de Medellín, en la edición de este año.
Esta ciudad ha sido conocida anteriormente ante los ojos del mundo como una potencia del narcotráfico y violencia, pero en la actualidad se llenó de colores con esta tradición.
El evento concluyó el pasado domingo su 59 edición, con el tradicional Desfile de Silleteros, y registró un crecimiento del 164% en la llegada de viajeros internacionales, según datos presentados por Medellín Convention & Visitors Bureau.
Esta importante ciudad colombiana encontró en esta feria la mejor manera de repotenciar su turismo, procedente en gran medida del extranjero y que ha tenido un crecimiento ocho veces mayor que el promedio mundial.
La promoción que le hicieron a la actividad en los diferentes países del mundo, además de convertir la ciudad en un jardín, resultó un éxito absoluto en esta importante tradición.
Tailandia, Italia, España, Brasil, Estados Unidos, México, República Dominicana, Perú y Chile, entre otros, son algunos de los países que conocieron la Feria de las Flores y la tradición silletera, la cual fue declarada en 2015 Patrimonio Inmaterial y Cultural de la Nación.
La Feria nació por primera vez hace poco más de medio siglo en el Caserio de Santa Elena, de donde provienen a la ciudad de Medellin millares de campesinos con enormes arreglos florales, para poder honrar a sus ancestros y disolver el pasado oscuro del que han sido víctimas.
Natalia Martínez, gerente de la Feria de las Flores, expresó que cada año la ciudad se convierte en un “foco turístico” para miles de extranjeros que están ansiosos de disfrutar su cultura, la estética que impresiona y las tradiciones nativas.
Los habitantes afirman que el “corazón” de este festival de flores será siempre el Desfile de Silleteros, una tradición “más sublime y serena” que se orienta, según indican, a ser declarada muy pronto Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.
Según menciona la alcaldía de Medellín, en la edición que acabó de finalizar este año, se registró una ocupación hotelera del 74% y un gasto promedio de cada visitante extranjero durante la feria fue de 180 dólares diarios.