Además de ser la provincia más al norte de Argentina, Jujuy se destaca por sus espectaculares formaciones rocosas de increíbles colores que la han convertido en postales imperdibles durante los últimos años.
Al tratarse de una provincia con tantos atractivos turísticos repartidos, a veces se puede complicar la movilidad entre un punto y otro. ¿Lo mejor? Las distancias se pueden acortar gracias a los servicios de micros de media y larga distancia, como La Veloz del Norte, con una amplia cartera de precios apta para todos los bolsillos.
Si estás pensado en hacer una escapada hacia esta región, existen destinos que no se pueden obviar y que son obligados a la hora de recorrer Jujuy. En este artículo te vamos a contar cuáles son.
Tilcara
Tilcara es un bello y antiguo pueblo ubicado a unos ochenta kilómetros de San Salvador de Jujuy. Se encuentra sumergido en el espectacular valle montañoso de la Quebrada de Humahuaca, en la confluencia del río Grande, que recorre toda la Quebrada y el río Huasamayo.
A pesar de su pequeño tamaño, la cantidad de actividades y lugares para conocer son muchísimas. Desde visitar el pueblo y la Iglesia de la Virgen de Rosario y San Francisco de Asís, a recorrer museos e increíbles accidentes geográficos.
Si pasás por este lugar mágico, no podés irte sin conocer la Cueva del Wayra (del Viento) donde vas a experimentar una vivencia mágica y espiritual rodeada de un paisaje único.
Otras excursiones obligadas son Pucará de Tilcara, uno de los tantos poblados prehispánicos que se ubican a lo largo de la Quebrada Jujeña y la Garganta del Diablo, un accidente geográfico conformado por movimientos de placas tectónicas que forman un gran cañón donde se yacen restos paleontológicos petrificados.
Más allá de que Tilcara es un pueblo pequeño, la cantidad de días recomendados para poder recorrerlo tranquilo es de, mínimo, tres.
Humahuaca
Humahuaca está situada a 126 kilómetros de San Salvador de Jujuy y a 2.939 metros sobre el nivel del mar. Posee una de las bellezas más fotografiadas y visitadas de Argentina: la Quebrada de Humahuaca, declarada patrimonio de la Humanidad en la categoría Paisaje Cultural en 2003.
Más allá de este famoso atractivo, la ciudad cuenta con muchas otras actividades para realizar tanto al aire libre como a puertas cerradas. Algunos de ellos son: la Laguna de Leandro, el Mirador Peñas Blanca, el Museo Arqueológico Muncipal y el Cabildo Histórico.
Si querés disfrutar sin apuro de la amplia variedad de lugares que esta ciudad ofrece, se recomienda una estadía de al menos cinco días.
Purmamarca
Si bien Purmamarca es considerado un pueblo de paso, cada vez son más los turistas que eligen hacer noche y dedicar algún día para conocer sus alrededores.
Es de público conocimiento que este pueblo junto con el Cerro Siete Colores forma una de las postales más famosas y quizás más fotografiadas del país. Sin embargo, esta localidad ofrece mucho más.
El Paseo de los Colorados y la Cresta de Lipán son dos destinos que no podés dejar de visitar. El segundo cuenta con un mirador para apreciar el increíble paisaje y, al descender la cuesta, se llega a las tan nombradas Salinas Grandes.
Volviendo al Cerro Siete Colores, muchas personas opinan que la mejor vista se da antes del mediodía ya que el sol está a espaldas de los espectadores.
San Salvador de Jujuy
San Salvador de Jujuy es una ciudad moderna que conserva costumbres ancestrales plasmadas en su historia, cultura, arte y gastronomía. Ubicada a 1259 metros sobre el nivel del mar, es cuna de una naturaleza espléndida y una identidad propia e inigualable.
En esta ciudad se puede hacer de todo. Si sos más de disfrutar de la arquitectura, no podés prescindir de las típicas caminatas por el centro histórico donde se pueden recorrer la Casa de Gobierno, la Catedral, la Plaza Belgrano y el Museo Histórico Lavalle.
Si tu afición va más por la naturaleza, entonces podés aprovechar todas las excursiones por paisajes soñados como el Cerro Tres Cruces, el Parque Provincial Potrero de Yalá y el Parque Botánico Municipal Baron Carlos María Schuel.
Bonus
No importa en qué parte de Jujuy estés, la increíble oferta gastronómica se hace sentir en toda la provincia. La cultura culinaria es una combinación perfecta entre la gran diversidad de materia prima y la identidad de sus ancestros.
Así que si tu próximo viaje es al norte argentino no podés dejar de probar las empanadas, tamales y humitas, las sopas y picantes, el locro, la calapurca, la tijtincha y el mote con chicharrón, las tortillas recién salidas del horno de barro y su gran variedad de vinos entre muchísimas otras delicias.