Santiago, Chile.- La Nueva Mayoría (NM), conglomerado oficialista que llevó por segunda vez a la presidencia de Chile a Michelle Bachelet, pasa por sus peores momentos como colectividad. A la baja en las encuestas, también se suman las permanentes disputas internas entre la Democracia Cristiana y el Partido Comunista y ahora la inminente salida del alá más de izquierda del sector conformados por la Izquierda Ciudadana (IC) y el Movimiento Amplio Socialista (MAS).
[pullquote]
La Nueva Mayoría estaba originalmente conformada por siete partidos -el PS, la DC, el PPD, el PR, el PC, la IC y el Movimiento Amplio Social (MAS)- y supuso el reemplazo de la ex Concertación de Partidos por la Democracia que gobernó el país por 25 años y que se rompió tras la derrota presidencial a manos de Sebastián Piñera.
[/pullquote]
El sector de izquierda de la NM, no se encuentra conforme con el desarrollo del programa de gobierno, las que según ellos, siempre fueron cooptadas por los sectores más conservadores y que no ha permitido las reformas que se prometieron en la campaña de Bachelet. El desmembramiento de la coalición oficialista se da por la izquierda, ya con la mirada puesta en las elecciones presidenciales de 2017, donde no están dispuestos a apoyar una eventual candidatura del ex mandatario Ricardo Lagos. Generarían una tercera fuerza política con sectores que no están en la NM como Revolución Democrática (RD), que lidera el diputado y ex dirigente estudiantil Giorgio Jackson y la Izquierda Autónoma (IA), que tiene como referente al también diputado y ex dirigente estudiantil Gabriel Boric.
[pullquote]El diputado Sergio Aguiló (IC) y el senador Alejandro Navarro (MAS), han expresado un apoyo irrestricto al gobierno de Michelle Bachelet, pero no están dispuestos a apoyar la candidatura de Lagos o a un candidato de la DC.[/pullquote]
A pesar de la salida de estas colectividades, sus principales representantes, el diputado Sergio Aguiló (IC) y el senador Alejandro Navarro (MAS), han expresado un apoyo irrestricto al gobierno de Michelle Bachelet, pero no están dispuestos a apoyar la candidatura de Lagos o a un candidato de la DC. Aguiló señaló que ellos no abandonan la NM, sino que no están dispuestos a apoyar estas eventuales candidaturas, lo que a la postre es postergar el fin del conglomerado de gobierno.
A la salida de estas colectividades se suman los recurrentes desencuentros entre la DC y el PC, siendo su último capítulo las críticas del ex Ministro de Interior, Jorge Burgos a la influencia programática del PC en el gobierno y diciendo que le hace mal a Chile. Además un documento emanado del Consejo Nacional de la DC, se refiere al conglomerado de gobierno como débil y cuestiona su oferta de gobernabilidad. El documento añade que «No nos parece oportuno anunciar que nos inhibiremos de la competencia presidencial, como tampoco ratificar o desechar anticipadamente nuestro acuerdo político actual». El ex Ministro de Este partido, Genaro Arriagada, opina que es mejor llevar el candidato demócrata a la primera vuelta presidencial y no a primarias dentro de la NM.
Por su parte el PC ha criticado a los sectores democratacristianos más conservadores de no comprometerse con el programa que se trazó para llevar a Bachelet a la presidencia por segunda vez. Los comunistas son unos férreos defensores del programa original con el que se fundó la NM, pero mirarán de reojo que se levante un conglomerado de izquierda con ellos ausentes.
Los casos de corrupción en que está envuelto su hijo, el escándalo del financiamiento de campañas políticas, más las disputas internas han mermado el apoyo a la presidenta. La encuesta Plaza Pública-Cadem, situó a Bachelet con un mínimo histórico de un 19% de apoyo a principios Agosto, muy lejos del 84% con el que terminó su primer mandato. A pesar de ello, el descontento ciudadano va más allá de la figura de la presidenta, sino que alcanza a los políticos en su totalidad.