La actriz Sofía Pachano aprovechó la fuerte crítica de una seguidora que la tildó de gorda, para enviar a la colectividad un mensaje de amor propio y aceptación.
La imagen y el peso son factores cuestionados ampliamente. Actores y actrices viven presionados al tener que cumplir a cabalidad los estándares de belleza para no ser objeto de burlas y críticas.
En esta ocasión le tocó el turno a Sofía Pachano, quien rescató lo positivo tras ser fuertemente criticada por una espectadora. La actriz fue tratada de gorda y no quiso dejar pasar por alto esta ocasión para construir un importante mensaje en torno a la imagen y la valía personal.
El estándar en los medios es ser joven y delgado, quienes no cumplen este precepto son víctimas de críticas. A través de su cuenta personal en la red social Instagram, Sofía Pachano compartió con sus seguidores cómo su cuerpo ha cambiado en los últimos meses.
Tras ser agredida por una espectadora de A chorus line, el musical en el que actúa, se empoderó y decidió responder a quien la llamó gorda. Por ello, decidió colar una fotografía de si misa en bikini, la cual acompañó con el siguiente texto:
“Soy Sofía, tengo 30 años, mido 1,57 y peso 58 kilos. Mi peso toda mi vida fue desde 50 a 52, y a los 22 años pesaba 47/48 por todo lo que bailaba. Nunca sufrí un trastorno alimenticio por suerte. El año pasado llegué a pesar 60 kilos. ¿Keee? 60 kilos? No me entraban los shorts, los pantalones”.
Afirma que el peso no define su ser
“‘¿Qué me pasó?’, me preguntaba. ‘¿Qué te pasó?’. Básicamente pasé un año muy difícil y encontré el placer en mi segunda profesión que es la gastronomía. Asados con amigos, salir a tomar un trago, viajar y comer de más. Me hice estudios pensando que quizás era hipotiroidismo porque ‘¿como voy a engordar así?’ Sí, mami, engordaste así y ¿cuál hay?»
Además, agregó: No bastaba la presión que ya tenía con ser la hija perfecta en una situación familiar muy difícil, tenía que sumarme la presión de ser flaca y hermosa para gustarle a andá a saber a quién, y conseguir tal trabajo en la tele. Dios mío. No soy flaca por naturaleza, soy normal y mi peso desde que crecí oscila así. Y odio ir al gimnasio (pagué enero y fui 3 veces, la peor inversión de mi vida)”.
“Comparto esto porque ayer una chica a la salida de A Chorus Line se me acerca para saludarme y tuvo el tupé de decirme ‘¿Qué te paso? Estás más (gesto de gordita)?’. Fue la gota que derramó el vaso. Hace meses vengo pensando (gracias a haber viajado y visto otras sociedades) que estamos cagados en este país (chocolate por la noticia, ¿no?). Nuestro ideal de belleza está por las nubes, la presión que sentimos por lo estético es ilógico, que si sos gorda, que si sos muy flaca y no tenés carne. ¡Chicos me marean!”, siguió cuestionando.
También comentó: “Me llevó meses entender que este es el cuerpo que me puse para transitar un difícil momento, ahora lo abrazo y ya iré bajando sin la presión de ninguna sociedad que espera que yo sea flaca y ni hablar lo que me costó exponerme en un escenario al lado de bombas en malla de baile, me tuve que decir varias veces ‘Sofía, sos más que 8 kilos’. ¿Por qué no nos empezamos a fijar en lo que realmente importa? Gracias a todos los que compartieron su historia conmigo por mensaje, abrazo a todas las mujeres y a los hombres con panza de birra también. Soy una mujer normal, que ama comer, tomar vino, bailar y hacer asados”, concluyó.