Montevideo.- Uruguay busca avanzar con el cumplimiento de los artículos 37 y 40 de la Convención sobre los Derechos del Niño con la firma de un acuerdo.
En Montevideo fue firmado un memorando de entendimiento entre el Instituto Nacional de Inclusión Social Adolescente (Inisa) de Uruguay y el Sistema de las Naciones Unidas (SNU), en el marco del diseño de acciones conjuntas para fortalecer el sistema penal juvenil.
Con la firma de este acuerdo que avala el período 2016-2020, el Gobierno uruguayo se comprometió a cooperar en la promoción de los derechos humanos así como también garantizar y proteger el cumplimiento de los derechos de los adolescentes.
En ese sentido, la presidenta del Inisa, Gabriela Fulco, señaló que el personal será capacitado y se rediseñarán las áreas de gestión. Asimismo, serán implementados varios programas de salud mental ya existentes, y serán agregados dos más, uno de deporte y uno de educación.
[pullquote]Son personas menores que todavía tienen mucho espacio por delante[/pullquote]
Fulco explicó que este acuerdo busca crear las medidas necesarias para seguir a los jóvenes que se dedican a delinquir a través de un programa de tratamiento interdisciplinario que evaluará las necesidades del joven, de su familia y de su entorno.
En estos programas «pueden estar incluidas algunas cuestiones que tiene que ver con justicia reparativa pero básicamente están enfocadas a que el tratamiento se haga en medio libre y puedan ser seguido por un equipo técnico», detalló.
Además, la ejecutiva valoró el aporte que el SNU está haciendo en Uruguay, ya que va de la mano con la política del país en el entendido que lo fundamenta, que sería “proteger los derechos humanos de los adolescentes y jóvenes”, puntualizó.
Por su parte, la española Denise Cook, quien funge como coordinadora residente de la ONU Uruguay, resaltó el esfuerzo del Gobierno para mejorar el modelo de reclusión, y por ayudar en la disminución de las cifras de los menores privados de libertad y que se implemente un programa “más creativo y productivo” para los jóvenes uruguayos.
En cuanto a los jóvenes que han cometido penas realmente graves y que deben estar recluidos, Cook pidió que esas condiciones «sean de rehabilitación porque son personas menores y que todavía tienen mucho espacio por delante. Ojalá para mejorar», sentenció.